La alegría de pertenecer a AMSIF
Queridas Amsifas hemos iniciado la preparación para celebrar los primeros 50 años de Amsif que extraordinario formar parte de este momento histórico, pero más aún, qué maravilloso es formar parte de Amsif.

Leyendo la Carta de Identidad puede percibirse la alegría de Carmelita al comparar a Amsif con una planta que ha ido creciendo: “Nunca pensamos, ni soñábamos siquiera que nuestra pequeña obra de Educación de Adultos dirigida a la mujer mexicana de nuestra Iglesia y nuestro pueblo, llegara a ser, en pocos años, una realidad en muchas ciudades y con cientos de centros de Promoción Integral de la Familia”.

Y hoy tu y yo podemos afirmar: pertenecemos a Amsif, a esta obra que ha crecido como una árbol fecundo.
Me encanta el verbo pertenecer:
Jesús pide constantemente a sus discípulos que “permanezcan en El”. La permanencia hace referencia a la pertenencia. (Lc 15) para que puedan dar fruto.
El tipo de frutos va a depender de en dónde esté enraizado. Un árbol bueno no da frutos malos.
El amor así funciona. Si yo no permanezco (pertenezco), olvido pronto y me voy con quién sea y para dónde sea.